NO MATARAS
Resulta que en días pasados murió el último soldado canadiense que ha recibido la Cruz de Victoria. Le llamaban Smoky Smith. Este hombre participo en la II Guerra Mundial y fue parte de la campaña Italiana, allí un día de 1.944 se enfrentó a un tanque alemán y lo sacó de combate él solo, luego dió muerte a varios soldados alemanes. Por estos hechos se convirtió en un héroe de Guerra y recibió la mencionada condecoración.
Smoky Smith
Ahora que ha muerto se ha contado su historia en los noticieros, los políticos han acusado la gran pérdida que representa su muerte y se le han rendido homenajes a todo lo ancho de Canadá. Sin duda fue un hombre valiente y muchos creen que vivimos en un mundo mejor gracias a él y muchos otros veteranos que fueron a pelear esa y muchas otras guerras.
Todo este episodio me ha hecho pensar en el hecho de matar a otros. El punto es que matar es malo. Matar es pecado dicen algunas religiones (¿o acaso todas?), pero el caso de Smoky Smith nos da a entender que a veces matar está bien, ese es el mensaje que se envía cuando se premia a un hombre por su valor y por haber enfrentado y eliminado a cierto número de soldados enemigos.
Ahora, creo que la ley no castiga cuando uno mata en defensa propia. Es decir que antes de que el “malo” me haga daño yo me vuelvo más “malo” y lo mato antes que me haga algo. ¿Contradictoria la cosa no? Entonces podríamos decir no matarás a menos que te vayan a matar o que tal: Sólo matarás a quien te vaya a matar y si aciertas hasta te podríamos felicitar por haber eliminado un dolor de cabeza para la sociedad.
Claro el problema radica en quien decide si el “malo” era malo o no. Si Alemania hubiera ganado la guerra Smoky hubiera sido poco menos que un asesino. En conclusión pienso que no importan las circunstancias no se debería matar, pero claro yo nunca he estado en una situación de matar o morir.
La solución a este problema es sencilla (en teoría), consiste en respetar al otro. Cuando todos nos respetemos mutuamente y cada individuo entienda que todos tenemos los mismos derechos y obligaciones se acabarán los agresores y los agredidos que deban convertirse en agresores para defender sus derechos. El camino es largo pero creo que algún día llegaremos.